LA SALUD ES UN ESTADO DE COMPLETO BIENESTAR FÍSICO, MENTAL Y SOCIAL, Y NO SOLAMENTE LA AUSENCIA DE AFECCIONES O ENFERMEDADES.
El goce del grado máximo salud que se pueda lograr es uno de los derechos fundamentales de todo ser humano sin distinción de raza, religión, ideología política o condición económica o social.
En la celebración vital y auténtica se halla el mayor logro: el elixir de vida, donde se manifiesta tu ser en estado puro.
Quererte a ti y querer la vida en todas tus formas.
Recuerda que nutrirte a ti mismo no es egoísta, es esencial para tu supervivencia y tu bienestar; y como decía nuestro querido Buda:
Mantener la buena salud del cuerpo es un deber de lo contrario no podremos mantener nuestra mente fuerte y clara. El agua rodea la flor de loto, pero no moja sus pétalos.
Y sin dejar a un lado el médico y alquimista Paracelso nos destacaba:
El grado máximo de un medicamento es el amor.
Los días pasan, las horas… la vida se desliza velozmente a través de nuestras experiencias y hay que aprovechar el tiempo y cada pequeño acto que hagamos que se realice desde la consciencia plena, porque ya no sirve sólo comer, hay que SABER comer; ya no sirve respirar, hay que SABER respirar, ni meditar, sino SABER meditar, no sirve contemplar, sino SABER contemplar, no sirve leer, sino SABER leer…
No sólo nos nutrimos de alimentos también nos nutrimos de emociones y pensamientos, que influyen en nuestro estado de salud, a eso lo llamo yo vivir en plena consciencia, cuando nos percatamos de cada movimiento interno.
Somos parte de la Madre Tierra y tenemos que cuidar nuestro templo, de esta manera también cuidamos de ella, al ser parte infinitésima de ella si nos hacemos daño con nuestros pensamientos y emociones también la dañamos a ella directamente.
